Un elefante en tu cabeza (II)
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Terminamos el TIPS anterior con este dilema de los autores (K. Simler, R. Hanson y J. Jarvis): si las normas sociales favorecieron las comunidades igualitarias, ¿por qué siguió creciendo nuestro cerebro?
Para los autores la clave está en las zonas grises de las normas. El cerebro se vio forzado a actuar creativamente para explorar y aprovechar esas zonas grises de las normas.
Estas zonas grises, siempre según los autores, desarrollaron nuestra habilidad para engañar, actuar con discreción, argumentar, defender un comportamiento o convencer a los demás…
Como mentir de forma sistemática consume mucho espacio mental (contar la verdad es más sencillo) y te obliga además a controlar tu propio cuerpo (no ponerte nervioso, sudar, sonrojarte…) desarrollamos una técnica infalible para engañar a los demás…
Nos comenzamos a engañar a nosotros mismos.
Este proceso lo llaman racionalización, es decir, la producción de historias elaboradas para engañarnos a nosotros mismos de forma inconsciente.
El cerebro selecciona la información que le interesa para construir una historia que encaje.
Crear esas historias de forma consciente multiplica las posibilidades de que nos pillen, pero hacerlo de forma inconsciente nos permite defenderlas de forma mucho más contundente.
Una forma eficaz de engañar (y auto engañarse) son las medias verdades. El cerebro selecciona la mejor versión de las existentes para producir historias elaboradas consistentes.
El elefante en la cabeza es nuestro lado egoísta, capaz de engañarnos (según los autores) a nosotros mismos para desarrollar una sofisticada forma de sacar ventaja en la comunidad.
No obstante, ellos insisten en que no debemos identificar el elefante en nuestra cabeza, nuestro lado autócrata, como algo malo.
A pesar de nuestro lado egoísta, hemos sido capaces de cooperar para llegar incluso hasta la luna…
Terminamos aquí esta colección de TIPS, no exentos de controversia, del ensayo “Un elefante en la cabeza” Esperamos que te haya resultado interesante.
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Nota: Este contenido se publicó originalmente como un Carrusel en Linkedin. Si quieres ver la publicación original, puedes visitar este enlace.
Crédito imagen: valiantsin suprunovich